viernes, 29 de agosto de 2014

Recomendaciones para la vuelta al cole



A menos de dos semanas de que empiece el curso escolar para los más pequeños, la Asociación Española de Pediatría (AEP) recuerda que éste es el momento perfecto para implantar hábitos y estilos de vida saludables que se mantengan durante todo el año, así recomienda empezar ya a acostumbrar  a los niños a la rutina del sueño.

El coordinador del Grupo de trabajo de Actividad Física de la AEP, doctor Gerardo Rodríguez, recuerda que los niños en edad escolar deben dormir entre 9 y 11 horas como mínimo, ya que está demostrado que una correcta higiene del sueño favorece el aprendizaje, la asimilación de experiencias y el crecimiento.

Para que la adaptación sea progresiva, se recomienda que un par de semanas antes de volver al cole, se acostumbre a los niños a acostarse pronto y seguir los horarios escolares. En este sentido, recuerda que el inicio de las clases y la vuelta a la "rutina" es un momento idóneo para incorporar hábitos sanos en la vida de los niños, de forma que pasen a formar parte de su estilo de vida y les ayuden a crecer sanos.

Por otro lado, Rodríguez recomienda "un mínimo de una hora diaria de actividad física moderada-intensa". "Una actividad física adecuada se relaciona con un mejor rendimiento escolar y con un mejor estado anímico de los niños", además previene el sobrepeso y las enfermedades cardiometabólicas en el futuro.

!CUIDADO CON EL PESO DE LA MOCHILA¡

En cuanto a los hábitos alimenticios, destaca que es importante volver a controlar de cerca la rutina alimentaria de los niños. En primer lugar, el desayuno es parte clave de la alimentación del niño y debe cubrir el 25 por ciento de las necesidades calóricas diarias e incluir lácteos, cereales y fruta.

 "Hay que ser proactivos en la alimentación de nuestros hijos y saber qué comen en el colegio para ofrecerles una alimentación equilibrada" aconseja Rodríguez, quien también recomienda dejar de lado la bollería industrial y "aprovechar a media mañana o la hora de la merienda para incluir fruta en la dieta en forma de piezas enteras, no de zumo".

Otra cuestión que acompañará al niño durante todo el curso es la mochila escolar, que no debe ser elegida al azar. Son recomendables aquellas con correas anchas y acolchadas, y hay que recordar que su peso no debe superar nunca el 15 por ciento del peso corporal del niño. "Hay que evitar que el niño cargue con peso innecesario", por ello recomienda el uso de carritos, así como ayudar al niño a cargar con la mochila si ésta es demasiado pesada.

'Chispazos' para recuperar la memoria



Si usted es una de esas personas cuya memoria no es tan buena como desearía o si tiene un familiar afectado por una demencia o Alzheimer, seguro que le interesará saber que investigadores de la Universidad Northwestern de Chicago han logrado mejorar la memoria en 16 personas con una técnica indolora y sin efectos secundarios. De momento, el experimento sólo se ha hecho en voluntarios sanos, sin ningún problema neurológico, y los cambios sólo permanecen 24 horas tras la estimulación, pero tanto los expertos involucrados en este estudio como otros ajenos a él consideran que es un buen inicio para intentar probar este método en pacientes y ver si tiene un efecto terapéutico.

Hace años se pensaba que la memoria se almacenaba en pequeñas estructuras que, a modo de cajones estancos, podíamos abrir cuando quisiéramos. Las numerosas investigaciones sobre el tema y ciertas aportaciones como las del neurocientífico español Joaquín Fuster han hecho que esta concepción vaya cambiando y que ahora se contemple la memoria como fruto de una actividad neuronal en red. Ese cambio ha sido clave para poder aplicar una técnica que se dirige sobre la corteza cerebral, la capa más externa del cerebro, y que actúa en el hipocampo, donde reside la memoria.

Las conexiones que se establecen entre neuronas y estructuras del cerebro, controladas especialmente desde el hipocampo, son clave para la memoria y su plasticidad. Nuestros recuerdos son maleables, así como lo puede ser la adquisición de nuevos aprendizajes. Sin embargo, en ciertas enfermedades como las demencias o el Alzheimer, las personas aunque logran acordarse de hechos acontecidos hace decenas de años son incapaces de recordar lo que han comido pocas horas antes o, simplemente, el hecho de haber comido. «En el Alzheimer hay memoria retrógrada porque ésta se encuentra en la corteza. El problema de estas personas es que no pueden adquirir nuevos recuerdos, ya que esta función se encuentra sobre todo en el hipocampo», explica María de Ceballos, del departamento de Neurobiología Celular, Molecular y del Desarrollo del Instituto Cajal del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Precisamente en esta zona es sobre la que han actuado los investigadores de la Universidad Northwestern, pero no directamente, sino a través de la estimulación magnética transcraneal en la capa más externa del cerebro. Se trata de una técnica que se viene utilizando desde hace varias décadas aunque no fue hasta 2009 cuando la agencia estadounidense que regula los medicamentos y productos sanitarios (FDA) aprobó el primer dispositivo para suministrar esta terapia. Inspirado en el electroshock, este método es mucho menos invasivo ya que no provoca convulsiones, contracturas musculares o dolor, por eso no requiere de ningún anestésico o medicación previa a su uso.

Consiste en generar un campo magnético a partir de una corriente eléctrica que pasa por una bobina de cable de cobre. Este campo es capaz de penetrar en la piel y el hueso, activando principalmente la zona más superficial del cerebro, es decir, la corteza cerebral. Hasta el momento, se ha venido empleando para la depresión resistente, el trastorno de estrés postraumático, el obsesivo-compulsivo, y en otras patologías no psiquiátricas. Sin embargo, hasta ahora no se había evaluado su utilidad en problemas que tienen su origen en zonas más profundas del cerebro.

La novedad que han incorporado los investigadores estadounidenses es encontrar una forma de llegar al interior del cerebro. «Mediante el uso de la resonancia magnética funcional, (MRI), fuimos capaces de identificar y manipular las interacciones entre las regiones corticales y una estructura profunda dentro del cerebro llamada el hipocampo. Ningún estudio previo ha utilizado este enfoque con el fin de dirigirse al hipocampo. Además, la mayoría de trabajos previos con estimulación magnética transcraneal se limitan a las regiones superficiales del cerebro y no han tenido en cuenta la estimulación de redes neuronales que son importantes para habilidades como la memoria», explica a EL MUNDO el investigador principal, Joel Voss.

Las estructuras cerebrales son ligeramente diferentes de una persona a otra y puede variar su localización en unos centímetros. Por eso, a los 16 voluntarios sanos que participaron en este experimento se les realizó previamente a cada uno de ellos una resonancia magnética con el fin de identificar la zona exacta de su corteza cerebral que se conecta más activamente con el hipocampo. Una vez marcada, se les realizó una serie de pruebas para medir su memoria. Después se sometieron a sesiones de estimulación de 20 minutos durante cinco días.

Tras realizarles las pruebas para evaluar su capacidad para recordar, se comprobó que su memoria había mejorado, según muestran los resultados del estudio publicado en la revista Science.

«Hemos demostrado por primera vez que es posible cambiar las redes neuronales de la memoria del cerebro humano. Estos cambios permanecen al menos 24 horas después de la estimulación y fueron responsables de una mejora en la capacidad para aprender nueva información», asegura Voss.

Para el investigador, los resultados son muy importantes para personas con Alzheimer u otras demencias ya que, como explica, «las conexiones neuronales que hemos cambiado están afectadas en las personas que tienen problemas de memoria por la vejez, así como en enfermedades como el Alzheimer. Sin embargo, todavía no sabemos si beneficiará a estos pacientes o si es seguro en ellos. Estamos iniciando un estudio para probar esta técnica en adultos mayores pero sanos así como en personas con Alzheimer en un estadio inicial».

Para Pablo Martínez-Lage, coordinador del grupo de estudios de la conducta y demencias de la Sociedad Española de Neurología, este estudio «abre una línea terapéutica a investigar. Esta técnica podría potenciar la reserva cerebral y utilizarse como herramienta para estos pacientes».

De la misma opinión se muestra María de Ceballos, quien señala que muchas de las alteraciones neurológicas que hay en la depresión se dan en la enfermedad de Alzheimar. Hace años, se hicieron muchos estudios en los que se combinaban ambos tipos de pacientes. Tiene un sentido que se extienda a otro tipo de problemas neurológicos. Esta es una aproximación no muy invasiva por lo que merece la pena investigarse y utilizarse". El inconveniente que le ve de momento a esta técnica es que su efecto no perdura en el tiempo. "Para mejorar la memoria se tendría que dar estimulación transcraneal todos los días".

Una dieta rica en tomate para ayudar a prevenir el cáncer de próstata



El tomate es una de las hortalizas estrella de nuestra alabada dieta mediterránea. No solo por lo sabroso, nutritivo y versátil sino por sus propiedades beneficiosas para la salud. Estudios recientes han determinado, por ejemplo, que el sofrito de tomate protege nuestro corazón y que triturado ayuda a reducir el colesterol. Y ahora también podría convertirse en un arma eficaz para prevenir el cáncer de próstata.

Una nueva investigación de las universidades de Bristol, Cambridge y Oxford ha determinado que comer diez porciones de tomate a la semana (fresco, triturado, en cremas, salsas, etc) reduce en un 18% el riesgo de desarrollar la forma más común de cáncer masculino.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores hicieron un seguimiento de la dieta y el estilo de vida de 1.806 hombres de entre 50 y 69 años con cáncer de próstata y lo compararon con 12.005 hombres libres de esta enfermedad.

El estudio, publicado en la revista médica «Cancer Epidemiology, Biomarkers and Prevention», y financiado por el Instituto Nacional para la Investigación en Salud (NIHR), es el primero de su tipo que plantea unas indicaciones dietéticas frente al cáncer de próstata, basado en tres elementos: selenio, calcio y alimentos ricos en licopeno, un antioxidante que lucha contra las toxinas que causan daño celular y en el ADN.

Así, los hombres que mantenían una ingesta óptima de estos tres componentes tenían un menor riesgo de desarrollar este tipo de tumor. Pero fueron los tomates y sus derivados, con un alto contenido en licopeno, los que demostraron un mayor beneficio, con una disminución del riesgo de hasta el 18%.

«Nuestros hallazgos sugieren que los tomates pueden jugar un papel importante en la prevención del cáncer de próstata. Y aunque serán necesarios más estudios para confirmar estos resultados, los hombres deberían incluir en su dieta una amplia variedad de frutas y verduras, mantener un peso saludable y ser activos físicamente», asegura Vanesa Er, de la Escuela de Medicina Social y Comunitaria en la Universidad de Bristol, y autora principal del estudio.

miércoles, 27 de agosto de 2014

La dieta verde como seguro de vida



Una dieta basada en verduras, frutas, cereales y legumbres reduce la presión arterial y las posibilidades de una muerte prematura por enfermedades cardiovasculares y previene la diabetes. Además, las verduras son protectoras frente algunos tipos de cáncer como los de pulmón, estómago y boca.

Hay diferentes dietas basadas en el consumo de verduras y cereales, desde el vegano, persona que basa su dieta en productos obtenidos la tierra, hasta aquellos que incorporan leche y huevos en su dieta diaria; hay incluso vegetarianos que admiten el consumo de pescado y otros denominados flexivegetarianos, que consumen ocasionalmente carnes blancas.

"Es muy flexible, cada uno lo entiende a su manera", asegura el delegado en Sevilla de la Asociación Vegetariana Española (AVE) y doctor en Psicología Social, el gaditano Francisco Ruiz Domínguez.

Los motivos para adoptar una dieta vegetariana son diversos, desde la sensibilidad con los animales a los beneficios para la salud o la conciencia ecológica, ya que relacionan la ganadería extensiva con la destrucción del medio ambiente y el aumento del CO2 y el metano.

En 2012 la revista científica Archives of Internal Medicine publicó un estudio realizado a 120.000 personas durante 28 años que asoció el consumo de carne con el incremento de la mortalidad prematura por cáncer y enfermedades cardiovasculares.

Según la Universidad de Harvard, aunque ya existían estudios previos que habían identificado la relación entre el consumo de carne y la diabetes, la enfermedad coronaria y ciertos cánceres, lo sorprendente es la magnitud, porque incluso "una pequeña cantidad de carne está asociada con un aumento significativo del riesgo a morir".

Para Francisco Ruiz, que sigue una dieta vegetariana ovoláctea, "es importante que se abandone el discurso del déficit alimenticio, ya que hay muchas instituciones internacionales que indican que trae muchos beneficios para la salud".

No obstante, reconoce que no es la "panacea", porque en algunas ocasiones se puede necesitar vitamina B12, obtenida de las proteínas de la carne, yodo o potasio, un déficit que el psicólogo compara con el que muchas personas omnívoras tiene de hierro o ácido fólico.

Si bien es cierto que una dieta que incluya huevos y leche debe satisfacer todas las vitaminas, la planificación de los alimentos durante la transición de una dieta tradicional a una vegetariana es esencial para cumplir con la pirámide alimenticia.

El consumo de legumbres y productos integrales como el arroz y el trigo son primordiales. Según la Comisión Europea, las legumbres se consideran un tesoro por las proteínas que aportan y son comparables con las de la carne.

Ruiz añade que la planificación de un patrón alimenticio es ideal para la creación de una rutina alimenticia sana y completa y que un cambio progresivo hacia la dieta vegetariana evita posibles cambios bruscos en el metabolismo.

Según un estudio de la Universidad de Oxford de 2002, la población que sigue una dieta vegetariana tiene un riesgo inferior a la morbimortalidad (muerte causada por enfermedades).

Además, alimentos cotidianos en la dieta vegetariana como la fibra soluble, los frutos secos, los esteroles vegetales (legumbres, las semillas, los cereales integrales), la soja, los flavonoides y otros fitoquímicos reducen la posibilidades de enfermedades cardiovasculares.

El consumo de fruta y verdura, de 5 a 10 pieza diarias, reduce la presión arterial, y un estudio realizado en 2010 revela que existen beneficios preventivos para las personas con riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 con la ingesta de verduras, cereales integrales, legumbres y frutos secos.

Según el World Cancer Research Fund, las frutas y verduras son protectoras frente al cáncer de pulmón, boca, esófago y estómago ya que contienen una compleja mezcla de fitoquímicos con una potente actividad de antioxidante, antiproliferativa.

El síndrome postvacacional depende de nuestra satisfacción con la vida



Cada año se produce un aumento de casos de síndrome postvacacional al final del verano coincidiendo con el fin de las vacaciones de la mayoría de los ciudadanos, y su intensidad es un medidor que puede revelar y poner a prueba la satisfacción individual de cada individuo.

Así lo reconoce el vicepresidente de la Asociación Española de Psiquiatría Privada (ASEPP), José Antonio López, que cree que cada vez son más los españoles que "pagan a la vuelta de las vacaciones el precio de la cada vez más agresiva civilización que estamos construyendo".

Los síntomas más frecuentes son irritabilidad, dificultad a la hora de concebir el sueño, cansancio o una sensación de profunda apatía y tristeza, indica el experto, y suelen durar entre siete y diez días. No obstante, este experto cree que la intensidad y durabilidad de estos síntomas revela que, más allá del abatimiento que puede suponer el final de las vacaciones, hay "algo que no va bien en la vida del individuo".

"Como norma general, cuanto más intensos son estos síntomas, mayor disconformidad encuentra la persona con su vida y más necesaria se hace la intervención profesional", defiende López Rodríguez.

La personalidad y la capacidad de adaptación de cada individuo es también un factor muy importante a tener en cuenta ya que "no todo el mundo tiene las mismas armas psicológicas" para combatir la vuelta a la rutina tras las vacaciones.

LAS PERSONAS DEPRESIVAS, MÁS RECURRENTES

"Se debe tener una visión optimista de cualquier cambio, y no todo el mundo la tiene", asegura el doctor José Antonio López, quien explica además que "las personas tendentes a la depresión o que ya han pasado con anterioridad por un síndrome postvacacional, son más propensas a padecerlo de nuevo".

La clave es, según el experto, ser conscientes de que, en la mayoría de los casos, ya que se trata de un síndrome adaptativo, como cuando cambiamos de estación o cambia la hora. "Nos sentiremos extraños con el ambiente e incluso con nosotros mismos unos días y luego pasará", asegura.

Además, aconseja, no ponerse el "traje del invierno" al llegar septiembre, ni bajar las persianas, y hacer una vida invernal. "Aún quedan horas de luz, una temperatura que permite pasear, alarguemos el verano unas semanas, salgamos uno o dos días entre semana, y busquemos nuevos estímulos que nos hagan sentirnos algo más vivos", cita el vicepresidente de ASEPP como recomendaciones.

SÍNDROME PARA TODAS LAS EDADES

Por otro lado, este experto admite además que los más pequeños de la casa no están exentos de padecer este síndrome tras las vacaciones, ya que generalmente suelen presentar síntomas similares durante los primeros días de colegio, manifestándolo a través de un sueño intranquilo o la falta de apetito.

"Al igual que los mayores, tras un largo periodo en el que no han tenido horarios, ni obligaciones, los niños pueden presentar angustia frente a la vuelta al colegio y la separación de sus padres", explica el doctor.

En estos casos, como sucede con los adultos, también hay diferencias en función de la personalidad del menor, de modo que "el niño más ansioso, que está siempre pegadito a su padres, que es poco explorador de cosas nuevas, lo van a notar más, al igual que aquellos niños que van por primera vez al colegio o la guardería".

En este sentido, el doctor explica que a los niños se le puede ayudar "estando más con ellos estos primeros días, siendo compresivos, explicándoles que es divertido ir al colegio y estimulándoles en su nuevo aprendizaje y, sobre todo, no enfadándose con ellos porque estos días puedan estar más irritables o no duerman.

Para ello, los padres deben entender que se trata de algo adaptativo y que ellos son los primeros que no han de mostrar preocupación frente al niño. "Los padres ansiosos hacen niños ansiosos, y la mejor prevención se realiza durante todo el año. Lo mejor es dejar a los niños que exploren y no ser sobreprotector con ellos", concluye.

El desafío de las letrinas



Reducir el número de personas que no tiene acceso a letrinas o unas instalaciones sanitarias mínimas es uno de los Objetivos del Milenio que la ONU se fijó para 2015. Sin embargo, según datos de la Organización Mundial de la Salud, en 2011 más de mil millones de personas seguían defecando al aire libre, una práctica que se asocia con la difusión de enfermedades como el cólera, la disentería o la transmisión de parásitos intestinales. A meses vista de que se cumpla la fecha, tanto gobiernos como ONG dan por hecho de que el reto no se podrá cumplir, en parte porque el problema no es solo una cuestión de infraestructuras. Un trabajo publicado esta semana en la revista PLoS Medicine da cuenta del enorme desafío que supone.

El equipo liderado por Sumeet Patil, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de California, ha evaluado los efectos de una de las campañas que se han llevado a cabo en la India para tratar de mejorar el acceso a soluciones sanitarias. El país asiático es uno de los focos del problema, aunque desde finales de los años 90 ha implementado varios programas para mejorar la situación. Uno de ellos, denominado India's Total Sanitation campaign se desarrolló, entre otros estados, en la zona de Madhya Pradesh, una de las más desfavorecidas del país. "El objetivo de este programa es que en la India rural no se defecara en la calle. La meta en cada pueblo es asegurar que en todos los vencidarios, colegios, etc. se utilicen los baños al igual que otras infraestructuras y servicios sanitarios. Con esta medida se esperaba incrementar la salud infantil, al igual que mejorar la dignidad y privacidad de las personas. Porque la mayoría de las enfermedades transmitidas por el agua se pueden prevenir ofreciendo suministros de agua segura, higiene y sistemas sanitarios", explica a EL MUNDO Patil.

Sin embargo, a juzgar por los resultados del trabajo, el logro no ha sido tan contundente. Según los datos de los investigadores, tras la campaña, se incrementaron los hogares con instalaciones higiénicas en un 19% y el porcentaje de adultos que hacía sus necesidades en la calle pasó del 84% al 73%, un éxito muy modesto comparado con las expectativas. Además, estos resultados no tuvieron ningún efecto sobre la salud de los niños de la zona, medido en parámetros como el crecimiento, la anemia o la prevalencia de enfermedades intestinales.

Uno de los datos más llamativos del trabajo es que un porcentaje significativo de aquellos que construyeron letrinas en su hogar continuaron defecando al aire libre. El problema no es sólo la falta de acceso a instalaciones adecuadas, aunque esta perspectiva es muy importante, subrayan los investigadores. Es necesario tener también en cuenta la perspectiva cultural, y analizar cómo es posible hacer llegar a estas poblaciones un necesario "cambio de comportamientos".

"Nuestro estudio presenta un relato de lo difícil que puede ser alcanzar una cobertura universal y la eliminación de la defecación al aire libre para estos programas", señalan en las páginas de la revista médica.

Pese a todo, reconocen que su trabajo tiene algunas limitaciones a tener en cuenta, como el hecho de que el seguimiento se realizó 21 meses después de haber concluido el programa, lo que quizás no haya dado margen para la implementación completa de nuevos hábitos y que los progresos se compararon con lugares en los que la falta de sanitarios tampoco era total.

En un artículo que acompaña al estudio, Clarissa Brocklehurst, del departamento de Salud Pública Global de la Universidad de North Carolina (EEUU) subraya que, pese a que el estudio muestra que el problema es, en ocasiones, "más un problema de comportamiento que de ladrillos y cemento", no hay que cejar en el empeño de mejorar el acceso a instalaciones sanitarias en todo el mundo.

"No hay tiempo que perder. Si hay que salvar a generaciones de niños de los problemas y las enfermedades que provoca, y hay que salvar a generaciones de mujeres y niñas de la indignidad y el riesgo que la defecación al aire libre conlleva [dos niñas fueron violadas y asesinadas en la India cuando buscaban un lugar apartado para hacer sus necesidades], centrarse en el problema de acceso sanitario debe ser una de las mayores prioridades de La India", sostiene.

Por otro lado, existen otras medidas en las que hay que hacer hincapié para evitar las enfermedades que matan a millones de niños. Como señala a este periódico Sumeet Patil, también habría que llevar a cabo "tratamientos para el consumo de agua, enfatizar en el lavado de manos con jabón, abastecimiento de agua corriente... Todas estas medidas reducen las infecciones entéricas. Cambiar comportamientos es algo muy complejo y no hay nadie que tenga un modelo con eficacia demostrada. No obstante, los defensores de la iniciativa Community Led Total Sanitation (CLTS) [programa para eliminar la defecación en las calles] citan su éxito en Bangladesh en el cambio de conductas, pero yo no conozco ningún estudio de investigación rigurosa sobre esto", concluye.

La Epo podría reducir el daño cerebral en los bebés prematuros



La supervivencia de los bebés prematuros ha mejorado en las últimas décadas gracias a los avances en los cuidados obstétricos y neonatales. En la actualidad, cerca de 400.000 niños nacen cada año en Europa antes de la semana 32 de embarazo, y 2,6 millones en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud. Sin embargo, nacer antes de la semana 37 de gestación implica un aumento de las alteraciones a largo plazo en el desarrollo neurológico, con un mayor riesgo de sufrir parálisis cerebral, anomalías visuales o auditivas y trastornos del aprendizaje, además de diversas patologías crónicas en la vida adulta.

Los bebés prematuros, respecto a los nacidos a término, tienen una maduración incompleta del cerebro, especialmente de la sustancia blanca, responsable de transmitir la información en el sistema nervioso. Estas anomalías se conoce como encefalopatía del prematuro, y se caracteriza por lesiones y pérdida de sustancia banca y alteraciones en el desarrollo de la corteza cerebral.

Un trabajo publicado en el último número de JAMA asegura que un tratamiento utilizado rutinariamente para combatir la anemia en los prematuros, parece tener también un efecto neuroprotector y disminuye significativamente el daño cerebral en los bebés.

La hormona del dopaje

El fármaco en cuestión no es otro que la eritropoyetina sintética, o EPO. Esta hormona que estimula la producción de los glóbulos rojos de la sangre y trae de cabeza a los ciclistas y otros atletas por su influencia en el rendimiento deportivo (dopaje), cuando se administra a dosis altas inmediatamente después del parto reduce el número de lesiones en la materia blanca y gris del cerebro.

La EPO tiene receptores en el sistema nervioso central y ha demostrado previamente un efecto neuroprotector en los modelos animales. Un estudio reciente ha resaltado que se asocia a mejoras en las habilidades cognitivas de los bebés pretérmino de 18 a 22 meses.

Puesto que un ensayo ha demostrado que administrada cada 24 horas en altas dosis en los primeros tres días de vida es bien tolerada y no tiene efectos secundarios, investigadores del Hospital Universitario de Ginebra se propusieron comprobar el efecto de la hormona en el cerebro de los bebés prematuros.

Para ello realizaron un estudio en el que 495 bebés (nacidos entre las semanas 26 a 32 de gestación) fueron asignados al azar para recibir eritropoyetina humana recombinante (256) o placebo (239) por vía intravenosa antes de 3 horas del nacimiento, de 12 a 18 horas, y de 36 a 42 horas después del nacimiento.

Pruebas de imagen

En un subgrupo no aleatorizado de 165 de los 495 lactantes, la mitad de los cuales habían recibido las tres dosis de EPO en los dos días siguientes al nacimiento, evaluaron las anomalías cerebrales mediante resonancia magnética (MRI).

Los investigadores encontraron que, en comparación con los controles no tratados, un número menor de los lactantes a los que se les administró eritropoyetina tenían alteraciones en la materia blanca (22 por ciento frente al 36 por ciento); intensidad de la señal en la sustancia blanca (3% vs 11%); pérdida de sustancia blanca periventricular (18% vs 33%); y menos lesiones en la materia gris (7% vs 19%).

"Hemos encontrado que los cerebros de los niños que habían recibido el tratamiento tenían mucho menos daño que los del grupo control, que recibieron un placebo", explica uno de los investigadores: "Esta es la primera vez que se ha demostrado el efecto beneficioso de la EPO en los cerebros de los prematuros".

Un paso importante

A pesar de lo alentador de las estadísticas, los autores destacan que estos resultados requieren una evaluación en un ensayo independiente, así como una investigación de la asociación de la EPO con los resultados observados sobre el neurodesarrollo de los prematuros.

La investigación forma parte de un amplio estudio suizo realizado en cooperación con la Universidad de Zurich, que incluye a 495 niños nacidos en Suiza entre 2005 y 2012. Parte de este trabajo se centrará en el desarrollo neurocognitivo de los pequeños participantes, que serán sometidos a diversas pruebas de desarrollo a los dos y cinco años.

Como explica la profesora Petra Hüppi, que lidera el proyecto: "las pruebas de desarrollo de vanguardia como las que se realizan en nuestras unidades pediátricas deberían confirmar el efecto que el tratamiento con EPO tiene sobre las discapacidades del desarrollo neurológico que los bebés muy prematuros a menudo muestran durante su infancia". "Si esto fuera así, habríamos dado un paso importante en la prevención de daño cerebral y sus consecuencias a largo plazo en los bebés prematuros."

martes, 26 de agosto de 2014

Los deportistas de élite viven más



Los deportistas de élite, que realizan entrenamientos muy exigentes, viven más que la población general y tienen un riesgo un 40 por ciento menor de padecer ciertas patologías, según una investigación liderada por la Universidad de Zaragoza.

El estudio, que analiza los datos de 42.000 deportistas de todo el mundo, principalmente hombres, participante en el Tour de Francia, Juegos Olímpicos y campeonatos internacional, además de jugadores de fútbol y béisbol, ha sido publicado en la prestigiosa revista de la Clínica Mayo, Mayo Clinical Proceeding, ha informado la institución académica zaragozana.

Este meta-análisis sobre un total de diez estudios ha sido dirigido por Nuria Garatachea, profesora de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la Universidad de Zaragoza e investigadora del Grupo de investigación Genud (Growth, Exercise, Nutrition and Development) de la misma institución.

Además de vivir más que la población general, los deportistas de élite tienen un 42 por ciento menos riesgo de mortalidad por enfermedades cardiovasculares y un 37 por ciento menor de cáncer.

En este pionero estudio, en el que se aporta información precisa sobre el riesgo de mortalidad en deportistas de élite, se pone de manifiesto que existe una "fuerte evidencia epidemiológica sobre la importancia de la actividad física regular y moderada", han agregado las mismas fuentes.

Entre otras actividades, citan el caminar o trotar, en el manejo y la rehabilitación de enfermedades cardiovasculares y en la disminución del riesgo de muerte por enfermedades tales como hipertensión, accidente cerebrovascular, y diabetes tipo 2.

Las principales recomendaciones internacionales de actividad física aconsejan 150 minutos semanales de actividad física moderada o 75 minutos de actividad física intensa.

Sin embargo, han señalado las mismas fuentes, existe una "gran controversia" sobre los efectos que tienen los entrenamientos que realizan los deportistas de élite que compiten a alto nivel, que son muy intensos y que, además, se mantienen durante muchos años.

Y es que hay una "creciente evidencia" sobre que el ejercicio de resistencia intenso produce alteraciones cardiacas, principalmente fibrilación auricular.

Este trabajo "no apoya la hipótesis de que el entrenamiento de alto nivel sea dañino para el corazón", han afirmado desde la Universidad de Zaragoza.

Tras este macro estudio, los investigadores concluyen que, a partir de la evidencia científica disponible actualmente, los deportistas de élite viven más que la población general.

Esto indica según la investigación que los efectos del ejercicio sobre los beneficios para la salud no solo se limitan a dosis moderadas sino que parece que también son extensibles a mayores dosis, al menos en el caso de estos deportistas.

La directora del trabajo también resalta y advierte de que se necesita más investigación en este sentido en cohortes más homogéneas y con igual representación de mujeres y hombres.

De hecho, en este macro estudio, con un total de 42.000 deportistas, tan solo cerca de 800 son mujeres.

En este trabajo ha colaborado el profesor Alejandro Lucia y su grupo de la Universidad Europea de Madrid, con el que continuarán investigando en esta línea para intentar aportar datos a la comunidad científica sobre la dosis óptima de ejercicio para mejorar la salud de la población en general.

El cerebro, culpable del lento desarrollo físico de los niños



La infancia en los seres humanos dura mucho tiempo y en ella los niños crecen lentamente porque su cerebro utiliza el doble de glucosa, la energía que lo alimenta, que el de un adulto maduro, según muestra un nuevo estudio dirigido por antropólogos de la Universidad Northwestern, en Evanston, Illinois, Estados Unidos, cuyos resultados se publican en 'Proceedings of the National Academy of Sciences' (PNAS).

Esta investigación ayuda a resolver el antiguo misterio de por qué los niños humanos crecen tan lentamente en comparación con sus parientes animales más cercanos, al demostrar que la energía canalizada por el cerebro domina el metabolismo del cuerpo humano en esta etapa temprana de la vida y puede ser la razón por la que los humanos crecen a un ritmo más propio de un reptil que de un mamífero durante la infancia.

"Nuestros hallazgos sugieren que nuestro cuerpo no puede permitirse el lujo de crecer más rápido durante los años de la infancia porque se requiere una enorme cantidad de recursos para alimentar el cerebro humano en desarrollo", afirma el primer autor del estudio, Christopher Kuzawa, profesor de Antropología en el Colegio Weinberg de Artes y Ciencias de Northwestern. "Como seres humanos, tenemos mucho que aprender y el aprendizaje requiere de un cerebro complejo y hambriento de energía", añade.

El estudio es el primero en poner en común datos existentes de exploración cerebral mediante tomografía por emisión de positrones (PET) y resonancia magnética, que miden la absorción de glucosa y el volumen del cerebro, respectivamente, para demostrar que las edades en las que el cerebro engulle la mayor cantidad de recursos también son los años en los que el crecimiento del cuerpo es más lento.

CONSUMO DEL 66 POR CIENTO DE LOS RECURSOS DEL CUERPO

A los 4 años de edad, cuando esta "fuga de cerebros" está en su apogeo y el crecimiento corporal disminuye al mínimo, el cerebro quema los recursos a una tasa equivalente al 66 por ciento de lo que utiliza todo el cuerpo en reposo. Los resultados apoyan la hipótesis de que los niños crecen tan lentamente y durante tanto tiempo porque el cuerpo humano necesita desviar una gran parte de sus recursos al cerebro durante la infancia, dejando poco al crecimiento corporal.

"Después de cierta edad, es difícil adivinar los años que tiene un niño pequeño por su tamaño", pone como ejemplo Kuzawa. "Para ello, es necesario escuchar su voz y ver su comportamiento", añade el también miembro del Instituto para la Política de Investigación en Northwestern.

Anteriormente, se creía que la carga más elevada de los recursos del cerebro era superior en el nacimiento, cuando mayor es el tamaño del cerebro en relación al cuerpo, pero estos expertos encontraron que el cerebro agota su uso de la glucosa a los 5 años. A los 4 años, el cerebro consume glucosa a un ritmo comparable al 66 por ciento de la tasa del cuerpo en reposo metabólico (o más del 40 por ciento del gasto total de energía del cuerpo).

"El pico a mediados de la niñez en los gastos del cerebro tiene que ver con el hecho de que las sinapsis, las conexiones en el cerebro, se agotan a esta edad, cuando aprendemos muchas de las cosas que necesitamos saber para convertirnos en seres humanos con éxito", apunta Kuzawa.

"En su mejor momento en la infancia, el cerebro quema dos tercios de las calorías de todo el cuerpo en reposo, mucho más que otras especies de primates --señala William Leonard, coautor del estudio--. Para compensar estas grandes demandas de energía de nuestros cerebros, los niños crecen más lentamente y son menos activos físicamente durante este rango de edad. Nuestros hallazgos sugieren que los humanos evolucionaron hacia un crecimiento lento en esta etapa para dejar combustible para los cerebros".

España: mucho cubo de agua fría y poco dinero contra la ELA


Maite Solas lleva 20 años luchando para que la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) sea algo más que un nombre raro que se confunde con otra enfermedad, las esclerosis múltiple, que nada tiene que ver con este trastorno. Su lucha empezó el día en que su padre falleció por una parada respiratoria, la causa más frecuente por la que mueren estos pacientes. Ahora, dos décadas después, y gracias a la campaña Ice Bucket Challenge -conocida en España como cubo hELAdo- se muestra esperanzada porque esta idea americana, que ya ha conseguido 70 millones de dólares (unos 53 millones de euros), tenga un efecto en nuestro país.

Sin embargo, tanto ella como otros científicos y asociaciones españolas sienten que nuestro país todavía no es sensible frente a esta enfermedad. Según los números que se manejan, el cubo hELAdo por el momento sólo ha dejado en España menos de 30.000 euros, algo insuficiente para hacer realidad algunos ambiciosos -y necesarios- proyectos de investigación para un trastorno que no tiene cura.


La ELA es una enfermedad neurodegenerativa muy grave y debilitante de la que poco sabe. Su vinculación con el científico Stephen Hawking es lo que quizás le ha dado mayor visibilidad. Sin embargo, él no es el paciente que mejor representa a la mayoría de los enfermos, que suelen fallecer a los tres años del inicio de la patología.

Hay muchas cosas que se desconocen de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). No se sabe cuál es la causa ni qué factores la favorecen, qué hace que unos pacientes progresen más rápidamente que otros, etc. Lo poco que se conoce es que las neuronas motoras van muriendo poco a poco y que el cuerpo de la persona se debilita, llegando a perder la capacidad para respirar.

Maite, cuyo padre falleció por esta enfermedad, tiene todavía muy presente su memoria y su lucha. "Él quería que se donara dinero a la investigación. De hecho, los últimos años de su vida los dedicó a pintar -ya que no perdió la movilidad en sus brazos- y a donar el dinero de la venta de sus cuadros a la medicina. Por eso, yo hago todo lo que puedo para cumplir su deseo".

Bióloga celular en la Universidad Complutense, Maite dedica sus ratos libres a la presidencia de la Fundación Española para el Fomento de la Investigación de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (FUNDELA). «Nuestro objetivo es buscar fondos para financiar estudios y el dinero que recaudemos a partir de la campaña del cubo hELAdo lo dedicaremos íntegramente al Proyecto MinE a través de su web, de la página del estudio europeo o de la cuenta en Bankinter ES5301281290460100023087», un gran estudio europeo cuyo coordinador en España será Jesús Mora, neurólogo y todo un referente en este campo.

Apuesta de futuro

"Llevo mojándome por la ELA más de 30 años", afirma desde su consulta en el anteriormente llamado Hospital Carlos III y ahora Complejo La Paz-Cantoblanco-Hospital Carlos III. Por allí, el año pasado -como casi todos los años desde el inicio de esta unidad- fueron vistos (al menos una vez) más de 300 pacientes, un gran número si se tiene en cuenta que en España hay unos 3.000. La suya ha sido la unidad de referencia de muchas otras que han empezado a ponerse en marcha en nuestro país. Por eso será en este hospital madrileño donde se coordine la recogida de muestras sanguíneas de pacientes y voluntarios sanos que formarán parte de MinE. "Se pretende analizar comparativamente el genoma completo de 22.500 personas (15.000 con ELA y 7.500 sanas) para localizar las anomalías de su ADN, que no están en la población normal, y saber si tienen algo que ver con el deterioro de las motoneuronas".

En este estudio participan, además de España, Bélgica, Portugal, Irlanda, Reino Unido, Francia y Alemania. El nuestro, señala este especialista, es uno de los países más rezagados a la hora de aportar muestras de pacientes y voluntarios y en la recaudación de fondos para estos análisis que, de momento, sólo ha logrado el 1% de su objetivo. Porque este estudio tiene que ser financiado por cada uno de los países, ya que, "de momento, no cuenta con apoyo de la Comunidad Europea, aunque estamos en conversaciones".

Mora ha sido el elegido para dirigir la parte española porque, además de llevar años especializado en la enfermedad, forma parte de la Red Europea para el Tratamiento de la ELA (ENCALS), según sus siglas en inglés. "Los médicos e investigadores europeos estamos tratando de agruparnos para liderar los grandes estudios en esta enfermedad", asegura.

La incomunicación y la soledad son dos de los grandes problemas de esta enfermedad. Con la pérdida de la musculatura, el paciente va perdiendo su capacidad para hablar, aunque no sufre deterioro cognitivo. "Nuestra enfermedad es bastante difícil. Terminas siendo un vegetal. Mueres porque el diafragma deja de funcionar y no puedes respirar. Es totalmente depredadora y horrorosa", son adjetivos de Marisol Rodríguez, que lleva año y medio diagnosticada. Con 57 años, esta maestra de primaria tuvo que dejar la enseñanza por los problemas físicos que le generó el trastorno. "Sólo me ha afectado al brazo izquierdo pero no puedo sostener a ningún niño, como tampoco me puedo abrochar un pantalón o partir un filete. Sólo estoy tranquila porque mi ELA no es una forma hereditaria y no se la voy a dejar a mi hijo como herencia".

Marisol, al igual que lo fue el padre de Maite, es paciente de Jesús Mora. En este año y medio de enfermedad ha podido ver cómo la unidad del Carlos III ha cambiado para mal. "Antes te daban cita y te veían varios especialistas a la vez. En cambio ahora, sólo te citan para un médico y algunos especialistas ya no te ven. Esto supone más gasto sanitario, por ejemplo en ambulancias, y más incomodidad para los enfermos. No es mi caso. Yo puedo caminar, pero muchos tienen que ir al hospital en silla de ruedas o en ambulancia. Espero que los políticos reflexionen y vean que esta unidad era un referente. También que el dinero de la campaña vaya para investigar. Es lo más importante para mitigar esta enfermedad".

Una unidad inspirada en el modelo que había en el Carlos III está abierta desde 2010 en el Hospital de Bellvitge de Barcelona. "En el año 2001 me fui a San Francisco para ver cómo funcionaba una unidad de ELA y vi que era muy similar a la del doctor Mora. Tras años de reuniones logramos crearla. Aquí llega el enfermo y en una mañana es visitado por todos los especialistas, desde el neurólogo, al neumólogo, pasando por el rehabilitador y los de endocrinología y nutrición, psicólogos, trabajadores sociales... Porque tenemos que valorar la vertiente clínica y médica pero también la social. Y se trata de hacerlo todo en una mañana o tarde para que el paciente esté lo más cómodo posible", explica la responsable de esta unidad, Mónica Povedano.

En este sentido, Povedano afirma que el Carlos III, con Jesús Mora, han sido el referente de cómo se debía trabajar y han animado a muchos otros médicos para crear unidades similares. Aunque sólo la de Barcelona y la de Madrid están participando en un ensayo clínico para valorar la eficacia de un nuevo tratamiento que pretende frenar la enfermedad. De momento, están reclutando a pacientes hasta conseguir más de 300. Es una esperanza más en esta desoladora enfermedad.

Dosis bajas de «Aspirina» reducen el riesgo de formación de coágulos de sangre



Dosis bajas de «Aspirina» reducen la aparición de nuevos coágulos de sangre venosa y representan una opción de tratamiento razonable para los pacientes que no son candidatos a tomar fármacos anticoagulantes a largo plazo, como la warfarina, según concluye un nuevo estudio publicado en la revista «Circulation: Journal of the American Heart Association».

«El efecto del tratamiento con Aspirina es menos del que se puede con inhibidores directos de la trombina de nueva generación, que pueden conseguir más de un 80% de reducción de los acontecimientos adversos cardiopulmonares y circulatorios. Sin embargo, la Aspirina representa una opción de tratamiento útil para los pacientes que no son candidatos a fármacos anticoagulantes por su coste o el aumento del riesgo de sangrado asociado con los anticoagulantes», destacó el autor principal del estudio, el profesor John Simes, de la Universidad de Sydney, Australia

En comparación con los pacientes tratados con placebo, los que tomaron 100 miligramos diarios de «Aspirina» tenía un tercio menos de riesgo de tromboembolismo (obstrucción de un vaso sanguíneo por un coágulo que se ha desplazado desde otro sitio en la circulación); trombosis venosa profunda (formación de un coágulo de sangre en una vena profunda, predominantemente en las piernas); embolia pulmonar (coágulo de sangre que afecta a las arterias que suministran sangre a los pulmones); infarto de miocardio (ataque al corazón), ictus o muerte cardiovascular.

La mayoría de las personas que han tenido un coágulo sanguíneo en una vena de la pierna (trombosis venosa profunda) o una embolia (donde los coágulos bloquean el flujo de sangre) están en tratamiento anticoagulante (como la warfarina) durante al menos seis meses, primero para disolver el coágulo y luego para evitar que vuelva a ocurrir.

Los autores de este estudio entienden que tomar «Aspirina» regularmente sería muy beneficioso para las personas que no pueden seguir un tratamiento con los medicamentos anticoagulantes.

«Este tratamiento es una alternativa a la anticoagulación a largo plazo y será especialmente útil para los pacientes que no quieren padecer la inconveniencia de estar bajo estrecha vigilancia médica o el riesgo de sangrado», subrayó el profesor Simes.

«La Aspirina será ideal en los muchos países donde el tratamiento anticoagulante prolongado es demasiado caro. Una ventaja importante de este tratamiento es su costo-efectividad, puesto que la Aspirina es barata. Esto podría significar un ahorro de millones de dólares de asistencia sanitaria en todo el mundo», calculó Simes.

lunes, 25 de agosto de 2014

Sonreír y hacer estiramientos a diario para cuidar la espalda



El tiempo libre del que disponemos en verano puede ser una oportunidad perfecta para centrarse en el cuidado de la espalda a través de gestos tan sencillos como sonreír o hacer estiramientos a diario, según la especialista en Fisioterapia del Hospital Quirón de Torrevieja, Marta Leyda. Factores más comunes en invierno como las prisas, los atascos, las constantes preocupaciones o las emociones mal gestionadas pueden hacer que "el tono de los músculos aumente y, con el paso del tiempo, provoquen dolor, acortamiento muscular o sensación de rigidez y bloqueo", ha señalado la especialista en un comunicado.

Llevar una vida sedentaria y coger peso de forma inadecuada también aumenta la probabilidad de que aparezcan molestias en el cuello o en la parte baja de la espalda, algo que, según Leyda, "no es ni más ni menos que un grito silencioso para que dejemos de maltratarlos y nos replanteemos cómo queremos hacer las cosas".

Tampoco las personas desempleadas se libran de estas dolencias, ya que "la intranquilidad y desasosiego que les genera pensar en su futuro y el de su familia, les causa una tensión que puede desembocar en dolor de espalda y otras molestias musculares", ha proseguido.

Para evitarlas, esta experta fisioterapeuta ofrece estrategias como empezar el día desperezándose durante varios minutos o realizar estiramientos cada día, además de practicar un deporte con el que realmente se disfrute, que no resulte una obligación.

Para ello, propone buscar espacios naturales como la playa o la montaña para hacer esos ejercicios, los cuales ayudan a disminuir la rigidez y a aumentar la fuerza y resistencia de nuestros músculos, además de liberar hormonas como las endorfinas o la serotonina.

La parte psicológica también influye directamente en el bienestar físico, por lo que Leyda aconseja sonreír y, siempre que se pueda, reír con los amigos, ya que una sonrisa "supone menos gasto energético a nivel muscular que poner cara de preocupación o enfado".

También es importante mantener la mente flexible y libre de responsabilidades y obligaciones innecesarias.

En este sentido, ha indicado que se debe disfrutar de tiempo libre para nutrir nuestro niño interior con masajes o ejercicios de relajación.

Otra clave es disminuir nuestro ritmo de vida, aprovechando que en vacaciones no hay horarios tan estrictos, y poner una atención plena en todo lo que se haga.

Cardiólogos piden restringir más el acceso de los jóvenes a los cigarros electrónicos



La Asociación Americana del Corazón ha emitido nuevas recomendaciones sobre el uso de los cigarrillos electrónicos y su impacto en los esfuerzos por controlar el consumo de tabaco. En su guía, que se publica en 'Circulation: Journal of the American Heart Association', esta organización científica pide nuevas regulaciones fuertes para evitar el acceso y la comercialización de cigarrillos electrónicos a la juventud y más investigación sobre el impacto del producto en la salud.

Sobre la base de la evidencia actual, su posición es que los cigarrillos electrónicos que contienen nicotina son productos de tabaco y deben estar sujetos a todas las leyes que se aplican a estos productos. "Durante los últimos 50 años, 20 millones de estadounidenses han muerto a causa del tabaco. Estamos ferozmente comprometidos con prevenir que la industria tabacalera provoque otra generación de fumadores", afirma Nancy Brown, directora ejecutiva de la Asociación Americana del Corazón.

"Estudios recientes plantean la preocupación de que los cigarrillos electrónicos pueden ser una puerta de entrada a los productos de tabaco tradicionales para la juventud de la nación y podrían hacer que fumar sea de nuevo una cosa normal en nuestra sociedad. Estos perturbadores acontecimientos han ayudado a convencer a la asociación de que los cigarrillos electrónicos tienen que estar regulados por una investigación profunda y fuertemente supervisada", añade.

"Los cigarrillos electrónicos han provocado un cambio importante en el control del tabaco", señala Aruni Bhatnagar, autor principal y presidente de Medicina Cardiovascular de la Universidad de Louisville, en Kentucky, Estados Unidos. "Es crítico que examinemos rigurosamente el impacto a largo plazo de esta nueva tecnología en la salud pública, las enfermedades cardiovasculares y los accidentes cerebrovasculares, y prestemos especial atención al efecto de los e-cigarrillos en los adolescentes", agrega.

La declaración de esta asociación recomienda una prohibición federal de los cigarrillos electrónicos para menores y muestra su preocupación por que estos productos puedan ser otro punto de entrada a la adicción a la nicotina entre los jóvenes. Los autores citan un estudio que se publicó en 'JAMA Pediatrics' de 40.000 estudiantes de secundaria y de escuelas preparatorias para la Universidad que indicaba que los adolescentes consideran los cigarrillos electrónicos como alta tecnología, accesibles y convenientes, especialmente en lugares donde no se permite fumar cigarrillos.

Así, la Asociación Americana del Corazón recomienda leyes estrictas que limiten la intensa comercialización y publicidad de los cigarrillos electrónicos y la prohibición de los aromas en estos productos, porque el empleo de publicidad sobre que contienen sabores seductores hacen a estos productos más atractivos para los niños y adolescentes. Otro estudio reciente concluye que la exposición de los jóvenes a los anuncios sobre los cigarrillos electrónicos se disparó en un 250 por ciento entre 2011 y 2013, llegando a 24 millones de jóvenes.

PELIGRO TAMBIÉN PARA LOS FUMADORES PASIVOS

Aunque que las sustancias tóxicas en los cigarrillos electrónicos son más bajas que en el humo del cigarrillo convencional, los no fumadores podrían involuntariamente estar expuestos a la nicotina en cualquier espacio confinado donde se utilizan estos productos, según estos expertos, que advierten que los cigarrillos electrónicos no regulados podrían potencialmente hacer retroceder el tiempo a los días en los que fumar en público era un comportamiento normal, rompiendo años de trabajo de las las leyes antitabaco y obstaculizando su actual aplicación.

Teniendo en cuenta estas preocupaciones, la asociación apoya incluir los cigarrillos electrónicos en las leyes estatales, si se puede realizar este cambio sin debilitar las normas  vigentes. Otra recomendación clave se centra en el papel de los cigarrillos electrónicos para ayudar a dejar el tabaco, apuntando que no hay pruebas que establezcan que estos productos son una ayuda para dejar de fumar.

Algunos análisis sugieren que el uso de los cigarrillos electrónicos para ayudar a los fumadores dejar de fumar puede ser igual o ligeramente mejor que los parches de nicotina. En todo caso, la asociación seguirá alentando a los médicos a utilizar estrategias para dejar de fumar probadas como primera línea de tratamiento para cualquier paciente, reiterando que cuando fracasa el tratamiento convencional, no es tolerado o resulta rechazado por un paciente que desea utilizar los e-cigarrillos los médicos deben desalentar su consumo.

Sin embargo, el comunicado de esta asociación destaca que los médicos deben informar a los pacientes de que los cigarrillos electrónicos no están regulados, pueden contener bajos niveles de sustancias químicas tóxicas y no han sido aprobados por la agencia norteamericana del medicamento (FDA, por sus siglas en inglés) como dispositivos de ayuda para abandono del tabaco.

La Asociación Americana del Corazón también propone que, dada la falta de estudios de investigación a largo plazo sobre la seguridad del e-cigarrillo, resulta apropiado para un profesional de la salud sugerir que el paciente fije una fecha de abandono del consumo de este tipo de productos.

Finalmente, en la nueva declaración, esta organización de expertos pide una investigación exhaustiva y continua sobre el uso de los cigarrillos electrónicos, sus características, su comercialización y sus efectos sobre la salud a largo plazo en los usuarios individuales, el medio ambiente y la salud pública.

"La nicotina es una sustancia química peligrosa y altamente adictiva, no importa la forma que adopte, en cigarrillos convencionales o en algún otro producto de tabaco", sentencia el presidente de la asociación, Elliott Antman. "Cada vida que se ha perdido por la adicción al tabaco se podría haber prevenido. Debemos proteger a las futuras generaciones de cualquier cortina de humo en el panorama de productos del tabaco que nos haga perder un terreno precioso en la lucha para que nuestra nación esté libre de tabaco al cien por cien", concluye.