Consumir
gazpacho habitualmente puede reducir el riesgo de hipertensión en un 27 %,
según un estudio de la revista Nutrition, Metabolism & Cardiovascular
Diseases, cuyo primer autor es el investigador Alexander Medina-Remón, del
Departamento de Nutrición y Bromatología de la Facultad de Farmacia de la UB.
En
esta publicación se ha evaluado el efecto del consumo de gazpacho en 3.995
personas del estudio Predimed, que analiza los efectos de la dieta mediterránea
sobre la prevención de las dolencias cardiovasculares en una población de alto
riesgo cardiovascular, informa la Universidad de Barcelona.
Estudios
clínicos y epidemiológicos previos asociaban el consumo de los principales
ingredientes naturales del gazpacho por separado (tomate, pepino, ajo, aceite
de oliva) con una reducción de la presión arterial y este estudio
"describe por primera vez que consumir gazpacho con frecuencia es
igualmente beneficioso y puede disminuir la hipertensión arterial", señala
Medina-Remon.
La
hipertensión arterial es una enfermedad que afecta a un 25 % de la población
adulta y es el principal factor de riesgo de los infartos miocárdicos y
cerebrales, la primera causa de muerte en la población occidental.
Según
la responsable del Grupo de Investigación en Antioxidantes Naturales de la UB y
coordinadora del estudio, la profesora Rosa María Lamuela, el efecto protector
del gazpacho en la presión arterial ha sido un resultado en parte
"inesperado, dado que el gazpacho contiene sal, que es uno de los
ingredientes restringidos para poder mantener los niveles de la presión
arterial".
Aun
así, los resultados del estudio describen que la presión arterial de los
consumidores de gazpacho es inferior a la de los no consumidores, posiblemente
porque los componentes bioactivos del gazpacho contrarrestan el posible efecto
del consumo de sal, afirma Lamuela.
Medina-Remón
señala que las "virtudes" del gazpacho vienen de que se trata de un
alimento con un alto contenido en carotenoides, vitamina C y polifenoles.
"El
balance final entre los compuestos bioactivos del gazpacho y su contenido en
sal hace que el producto sea cardiosaludable, es decir, al final prevalece el
efecto positivo de todos los ingredientes que pueden disminuir la presión
arterial por encima del efecto que podría tener la sal", argumenta el
investigador.
Los
expertos, que han aplicado técnicas estadísticas para conocer hasta qué punto
podría reducirse el riesgo de hipertensión gracias al consumo de gazpacho,
concluyen que en algunos perfiles de consumidores el riesgo podría disminuir
hasta un 27 %.
En
el estudio pluridisciplinar han participado investigadores del Hospital Clínic,
el Idibaps, el Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas, la
Universidad de Navarra, la Universidad de Valencia, la Universidad Rovira i
Virgili, la Universidad de Málaga, el Instituto de la Grasa-CSIC, el Centro de
Salud San Pablo, el Instituto Universitario de Investigación en Ciencias de la
Salud y el Hospital Universitario de Álava.
En
el futuro, el equipo tiene previsto potenciar líneas de estudio de los
mecanismos de acción que relacionan el consumo de alimentos ricos en
polifenoles con la reducción de la presión arterial.
El
Grupo de Investigación de Antioxidantes Naturales de la UB forma parte del
Departamento de Nutrición y Bromatología de la UB, de la Red de Referencia en
Tecnología de Alimentos de la Generalitat de Cataluña y del Instituto de
Investigación en Nutrición y Seguridad Alimentaria.
Ref:
Haz click aquí
No hay comentarios:
Publicar un comentario